PlayAttention: Mejora los comportamientos impulsivos de tu hij@

Un problema recurrente: nos encontramos ante un plato de galletas de chocolate después de comer sólo una. Sabemos perfectamente que es todo lo que debemos comer, pero el impulso nos puede y cogemos otra. Y otra. La ciencia nos explica cómo esta falta de control también nos afecta a largo plazo, y no se trata sólo de nuestra cintura.

Los comportamientos impulsivos se asocian a menudo con los niños y adultos con TDA/TDAH.

En algunos casos, les falta autocontrol. La impulsividad les lleva a actuar sin premeditación. No hay causa y efecto lógico en relación con la impulsividad; la mayoría de las veces, ellos mismos no pueden entender las consecuencias de sus conductas impulsivas.

La importancia de desarrollar el autocontrol o la autorregulación se ha estudiado desde hace más de 50 años.

A finales de 1960, el psicólogo Walter Mischel de la Universidad de Stanford hizo un experimento sobre la satisfacción aplazada y el control de impulsos (la capacidad de defendernos del impulso de comer otra galleta).

En su estudio, el Marshmallow Test (experimento de la “nube de azúcar”), Mischel ofreció a niños en edad preescolar una “nube” que podían comer de inmediato. Pero también les dijo que si esperaban  un rato, les daría una segunda “nube”.

Algunos de estos niños en edad preescolar experimentaron sensaciones de angustia por tener que estar sentados solos en una habitación y decidir entre comer la “nube” o esperar para conseguir una segunda “nube”.

Los niños utilizaron diferentes estrategias: algunos imaginaron que la “nube” era sólo un caramelo; otros se distrajeron cubriendo sus ojos o alejándose. Y aquellos  que optaron por la gratificación retrasada, esperaron durante 15 minutos y se ganaron su segunda “nube”.

https://youtu.be/y83qQ3jMRqo

Se realizó un seguimiento de estos niños durante años. Los investigadores descubrieron que los niños que fueron capaces de controlar sus impulsos, aceptar la satisfacción aplazada y por tanto retrasar la gratificación, tenían mejores resultados académicos a largo plazo en comparación con sus compañeros más impulsivos, que de inmediato devoraron la nube en menos de un minuto.

Los resultados principales indican además:

Mucha menor propensión a tener problemas de conducta

Muchas menos probabilidades de desarrollar adicción a las drogas

Muchas menos probabilidades de desarrollar obesidad al alcanzar la edad de Secundaria

Promedio de 210 puntos más de media en los resultados del SAT (Test de Aptitud Escolar Estadounidense)

Si bien estos resultados son significativos, la gratificación diferida, el control de impulsos, y por tanto en esencia, la planificación de objetivos a largo plazo también tiene valor práctico.

Es beneficioso para nuestros hijos que aprendan a gestionar adecuadamente las emociones básicas. En su vida personal, social y profesional, queremos que tomen las mejores decisiones con la adecuada planificación y ayudándoles a modificar el comportamiento para evitar precipitación y falta de autocontrol.

¿Cómo podemos ayudar a un niño o adulto con TDAH a mejorar el control de sus impulsos?

Modelar el comportamiento que deseas de tu hijo es un primer paso importante. Si tiendes a actuar impulsivamente cerca de tus hijos, es probable que vean tu comportamiento como algo aceptable y no sientan que intentas controlarlo. Si practicas un enfoque más tranquilo, más planificado y controlado, tus hijos tendrán un gran ejemplo.

Como la mayoría de las personas impulsivas no son conscientes de que están haciendo algo sin pensarlo detenidamente, el primer paso es crear conciencia, ser conscientes de las conductas autodistractoras o no deseadas. Las estrategias pueden ser implementadas una vez que la conciencia se ha desarrollado.

El módulo de modificación de conducta, integrado en el sistema Play Attention,  es especialmente apropiado para mejorar el autocontrol. El sistema incluye un catálogo de conductas no deseadas, presentes de manera muy frecuente en los casos de TDA/TDAH. Mediante la observación y registro de las conductas que el niño adopta en el juego, junto con la fijación de recompensas de refuerzo positivo para premiarle cuando logra reducirlas o eliminarlas, el niño aprende a autocontrolarse, a modelar su comportamiento y a controlar las conductas distractoras.

El moldeamiento de la conducta en Play Attention se basa en un planteamiento de refuerzo positivo, y utiliza una herramienta específica para ayudar en la modificación de la conducta: la Session Rating Scale (SRS) o Escala de Evaluación de Sesión, a través de la cual y de un modo muy sencillo podemos revisar las conductas a lo largo de las sesiones y realizar el seguimiento adecuado para premiar e incentivar los cambios de conducta observados.

El sistema permite a los usuarios ver la relación directa entre su atención y su comportamiento, por lo que el usuario aprende que mejor atención es igual a mejor comportamiento. Mejor comportamiento es igual a mejores notas en el colegio o mayor rendimiento en el trabajo.

Con el entrenamiento continuado, PlayAttention enseña al niño cómo autoregularse mejor y cómo reconocer la conducta no deseada y a partir de dicha identificación y reconocimiento, controlar sus impulsos y conductas a voluntad.

No esperes más, tanto si eres profesional y te interesa conocer cómo aplicar esta tecnología en tu práctica diaria, como si eres padre, madre o familiar de un niño o adulto con problemas de atención, TDA/TDAH o Asperger, consúltanos sin compromiso para conocer todo lo que te podemos ofrecer.