Creatividad: Encuentra la solución a tus problemas

Tendemos a identificar la creatividad con las artes o con los grandes descubrimientos científicos y tecnológicos. Sin embargo, el desarrollo de herramientas personales, que estimulen nuestra creatividad, nos ayudará a encontrar, más y mejores alternativas para solucionar los problemas del día a día y a encontrar mejores soluciones en cualquier proceso de toma de decisiones.

Ante una situación incómoda, que nos ocasiona tensión, preocupación o estrés, como explicaba hace unos meses en el post No quiero ir al colegio ,tenemos distintas alternativas: “luchar”, “huir” o “controlarla”. Casi siempre la más rápida y fácil es salir corriendo. Evitando la situación se evita el problema, pero la realidad es que no siempre es posible escapar. En los momentos de mayor valentía, de más energía o de saturación total, cuando ya no vemos otra salida, la vía de la lucha se convierte en una alternativa real, aunque siempre es la peor alternativa, de todos es sabido que la violencia sólo engendra violencia y lejos de solucionar nada, traerá nuevos problemas. Por tanto, tratar de controlar y resolver la situación siempre será la mejor alternativa, en la que ninguna de las partes termine ni dañada ni humillada. En la que todos puedan ganar.

Cuando creemos que lo hemos probado todo, cuando se nos han agotado las ideas, cuando el entorno se vuelve completamente hostil, posiblemente quedemos bloqueados, nuestra capacidad de tomar decisiones, de analizar, de dialogar o de proponer alternativas, será nula. Es precisamente en ese momento, cuando recuperar el control sobre nuestras reacciones, así como el entrenamiento en habilidades creativas, cobrará mayor relevancia. Para recuperar la capacidad de crear alternativas al conflicto debemos partir de un estado de atención plena, que nos permita percibir hasta el menor de los detalles que pueda aportarnos una salida.

Albert Einstein lo afirmó: “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”. Si tienes un conflicto con alguien o con algo, tal vez contigo mismo, has intentado todo y no consigues mejorar, si algo no te gusta, pero tienes obligación de hacerlo, tenerlo, percibirlo u observarlo, si te sientes mal y crees que lo has probado todo, aprende nuevas herramientas para encontrar nuevas soluciones.

Cómo solucionar los problemas

¿Has probado realmente todo? Te propongo lo siguiente, papel y lápiz en mano, escribe el problema a resolver. Sitúa el problema respondiendo a las siguientes cuestiones, recuerda, es importante que lo hagas por escrito:

  1. ¿Por qué tengo este problema?
  2. ¿Para qué quiero resolver el problema?
  3. ¿Con quién o quienes tengo el problema?

Escribir en papel a mano, te ayudará a procesar mejor y entender de manera más realista en su contexto el problema. Cundo ya lo tengas, podrás formular la última cuestión: ¿Cómo puedo resolverlo?

Para contestarla prepárate a abrir tu mente y a escribir todo lo que se te pase por la cabeza, sin matices, sin restricciones y organizando tus respuestas con ayuda del método que creó el psicólogo Edward de Bono de los “6 sombreros de colores”, este método, se basa en la idea de que habitualmente utilizamos una misma forma de procesar la información y una misma forma de decodificar los problemas, por lo que siempre llegamos a las mismas conclusiones, sin embargo ya sabemos, que para llegar a sitios distintos debemos explorar caminos diferentes.

Cada sombrero de un color diferente representa una forma de pensamiento característico diferente y único, diferente del nuestro. El “uso” en cada caso de un sombrero, nos proporcionará la libertad necesaria para explorar los caminos característicos de ese modo de pensamiento al que representa.

Haz seis listas de soluciones, una para cada color de sombrero, disponte a aportar soluciones llevando puesto en cada momento un sombrero diferente, según el color del sombrero con el que estés haciendo la lista, tus respuestas deben tener el matiz del color del sombrero que lleves puesto. Debes seguir este orden:

  1. Soluciones con el sombrero blanco: cuando lleves el sombrero blanco las respuestas serán datos objetivos disponibles, como fechas o números, no aparecerá información subjetiva, ni argumentos ni explicaciones.
  2. Soluciones con el sombrero rojo: cuando lleves el sombrero rojo escribirás repuestas emocionales, relacionadas con sentimientos o sensaciones, sin atender a la racionalidad y sin ofrecer ningún tipo de justificación, no tienen por qué ser lógicas ni coherentes.
  3. Soluciones con el sombrero negro: aquí escribirás desde un punto de vista lógico, desde la veracidad, con objetividad. Escribirás los errores, los riesgos, los peligros y los problemas potenciales que puedan surgir en el futuro, escribe el lado negativo del problema.
  4. Soluciones con el sombrero amarillo: Soluciones positivas, constructivas, idealiza las propuestas, buscando el por qué sí podrían y sí van a funcionar, aporta siempre los argumentos.
  5. Soluciones con el sombrero verde: bajo este prisma escribirás las respuestas más creativas, dejando de lado las propuestas negativas, lo más raro, lo más innovador, lo más inaccesible, lo más irreal, atrévete con las propuestas más extravagantes.
  6. Soluciones con el sombrero azul: con este sombrero organizarás tu pensamiento, para ello necesitarás distancia, tranquilidad y autocontrol, sólo entonces, repasarás las propuestas que escribiste con los otros sombreros, organizarás la información de cada uno de los anteriores y realizarás la conclusión. Escríbela y justifica por qué esta vez funcionará.

El pensamiento es como el agua, si la dejas discurrir por un canal llegará hasta la desembocadura, si haces una presa, el agua encontrará caminos alternativos a través de grietas o poros por los que seguirá discurriendo. Con el pensamiento sucede igual, si no se fuerza a buscar otros caminos, seguirá siempre por el camino conocido.

Encuentra siempre la tranquilidad, aléjate de la ofuscación, del estrés, la ansiedad o el enfado y la crispación para buscar soluciones. Relájate, respira hondo y comienza a escribir las alternativas. Si necesitas que te ayudemos, si llegado el momento no logras la calma necesaria, contacta sin compromiso con nosotros. Te enseñamos cómo recuperarla.